El otoño en el Parque Nacional de Risnjak es espectacular

Es un parque nacional muy frondoso, pequeño, de no más de 7000 hectáreas. Se cree que el nombre proviene de la palabra croata para denominar al lince: ris. Precisamente, el lince es uno de los tres grandes depredadores que habitan este área, junto con el oso y el lobo. Además del águila. Se encuentra entre los Alpes Dináricos y el Mar Adriático.

Pagamos 7€ cada uno por la entrada para pasar dos días en el parque. El clima fue perfecto para hacer rutas porque hubo sombra, la temperatura fue de 16-23 grados, no nos llovió ningún día, y estaba especialmente bonito el paisaje por allí. ¡Brutal, la verdad!

Dejo por aquí un enlace para que puedas ver qué rutas en el PN de Risnjak hay y cuál te gustaría hacer. Nosotros hicimos un par de rutas durante las dos mañanas enteras que pasamos: una desde Crni Lug y la otra desde Razloge. Las dos super bonitas porque el parque estaba en el momento álgido de su propio otoño y nos sentimos super afortunados de haberlo visto así (último fin de semana de octubre). Estuvimos muy tranquilos, estaba todo limpísimo y salvaje al mismo tiempo, se percibe que hay un gran respeto medioambiental porque no estaba nada pisado por fuera de las sendas oficiales, el contraste de colores se nos metió en la retina de una manera que ojalá podamos recordar durante mucho tiempo... ¡Menudo jaleo de colores! Las palabras que pueden resumir esos dos días por Risnjak podrían ser verde, naranja y amarillo. Y dos buenos consejos serían que no dejéis de ver el nacimiento del río Kupa cuando paséis por aquí, y que llevéis bien de agua y comida porque no hay apenas fuentes en medio de las rutas ni grandes pueblos o cabañas-tiendas donde comprar algo (por lo menos en estas fechas de otoño).

¡Que tus sentidos vivan una maravilla tras otra maravilla!

¡Ah! Y, como no hacer hincapié en el mundo micológico, nos quedamos super embelesados con todos los tipos de setas que vimos... Muchos más de los que podemos mostrar en este blog... ¡Pero qué maravilla y cuánto hongo bueno y no tan bueno! Hasta les mandamos fotos a los del Restaurante El Brote de Madrid para ponerles los dientes largos (no siempre van a ser ellos los que lo hagan con sus platazos maestros en instagram, jeje).

En resumen, ¡si hay seta, hay vida (buena)! Jajaja :)

De repente nos entró muchísimo antojo de cenar... ¡guíscanos! ¡Ahí lo dejo!

#begratefuleveryday